lunes, 24 de marzo de 2014

El abrazo



Ya no es nada para mi y está este afán de la tristeza
que somete.
Acompaño cada noche hasta mi cuarto
el cuerpo harto y su dolor
al abrazo de la cama fria.
Aullo amor
frente a la puerta cerrada.
El que se va y el que no es,
ni la oscuridad de sus ropas
ni el olor a mirra.
Debo aniquilar este corazón bastardo.

Mente que ve entre las cosas



He aquí mi corazón dando tumbo
entre las manos, pobremente cobijado.
Borbotones de alguna sensación tardía y disoluta que alimenta
mi angustia de deseos temporarios, o tal vez no.
Apilando pedacitos de ilusión para formar
alguna que otra metamorfosis del mismo cronograma extraño.
Una pulsión.
Estertores de finales y comienzos, y la pez que me ronda en el taxi al regresar.
Mente que ve entre las cosas, te admiro.
Hay destellos de razón en tus palabras y alguna que otra coincidencia.
Desparejo.
Si pudiera asirte y escuchar. Un vaso de agua
miel y sal, alguna borrachera
formas a nuestra semejanza o empatía. Molestias
repetidas en las rodillas ajenas.
No era cierta la ilusión de esa película, no debí extrañar.
Llegó la mañana,
insomne, y no fue suficiente.
La voracidad parece monstruosa
cuando se trata de vos, nada alcanza.
Una infusión mezclada
con los frascos y no hay más
sigue la tarde sin sorpresas.
Hermanito!,
prefirió una cinta pirateada al pegote del agua en la bañera.
Rejunte de anacronismos y teorías, -no debés cuidar a quien no quiere.
Lo llevaste en tu viaje cotidiano, tal vez sos vos.
Adherido a tu propio embalaje envejecido, creíste que empujar alcanza,
nunca es suficiente.
No otra vez el mismo estado, lo conocés.
No hay promesas.

Anábasis



Sangre, barro, esperma
y muerte,
quince minutos y una camisa equivocada,
un mensaje con destiempo.

Pánico y sermón inician temporada,
once días dura, eternidad
de descontentos.
Otra quimera.

Tiempo que sólo es el que te sobra,
en apariencia o realidad, indescifrable.
Serpentina en mi cabeza y va
de nuevo, ascenso para vos
y mi caída.

Tanto puse corazón
inservible a vos el mío,
otra vez
y como siempre.

domingo, 23 de febrero de 2014

T.S. Eliot

 Canto de Amor

...........


Y habrá tiempo, en verdad, para la niebla
amarilla que vaga por las calles
frotando sus espaldas contra los ventanales;
habrá tiempo, habrá tiempo
de preparar un rostro para afrontar los rostros que veremos;
y tiempo para el crimen, para la creación,
para todas las obras y días de las manos
que levantan y sueltan sobre nuestros pocillos su vana inquisición;
hay tiempo para mí, y hay tiempo para ti,
y hay tiempo para cien indecisiones,
y para cien visiones, y nuevas revisiones,
antes de las tostadas y del té.

sábado, 23 de noviembre de 2013

Kenny Lemes



Jueves

Que sea intenso, que deje marcas, que no se olvide, que la cara duela de tanta risa, que no quepan las fotos en la cámara, que no me alcancen las horas, que no me queden casi besos, que no quede nada por conocer, que me duelan los ojos, que me muera lleno, repleto. Que todo haya valido la pena. Que el fuego en el pecho queme. Que el mundo me quepa entero en el cuerpo, que los nombres se hagan carne, que el aire sea puro, que haya mar sobre mis párpados y arena en la planta de tus pies. Que haya lluvia y un cielo rojo, un frasco de luciérnagas y el auto a medio lavar en la puerta. Que la casa se llene de abrazos, que se enciendan los sahumerios, que el televisor se quede prendido y que los niños se duerman. Que el café sea siempre espeso. Que esté siempre tu mano. Que te quedes, que el ambar de tus ojos reine. Que no haya miedo. Que una pluma me acaricie los ojos, que me los lleve lejos. Y que un ancla me vuelva a hundir otra vez en el perfume de tu espalda.

Kenny
anestesiageneral.blogspot.com.ar